martes, 25 de noviembre de 2008


El universo escribio que fueras para mi...

-...


Te pienso todos los días... Cuando veo nuestras, bueno, ya perdí la cantidad de nuestras incontables fotos, siento EXTRAÑAR. Si, cada una de esas etapas que vivimos las extraño a flor de piel... Extraño nuestros primeros días cuando todo era lindo Ningún problema Era suceptible de empeorar, ningún problema era Problema! Pero cuando los problemas empezaron a ser lo Tampoco podía ser tan malo Porque nuestras crisis no llegaban a durar Horas. En un tiempo duraron un par de días... Pero las reconciliaciones hacían que esos días no fueran nada. Tus besos día a día se hicieron mas dulces y venenosos. Que loco eso... Cada beso era lastimoso y cicatrizante a la vez y era algo que nunca antes me había pasado. También se hicieron droga con cada día que los sentía. Las crisis dejaron de importar Y se llevaron las palmas todas nuestras reconciliaciones, todas salieron victoriosas porque ninguna crisis puedo separarnos. La pasión también tuvo buenos laureles en nuestra historia. Pero ahora extraño nuestras crisis, nuestros días, nuestras noches, nuestros besos dulces y venenosos, nuestras peleas, nuestros mensajes, nuestra historia Que aunque intente no morir Va quedando lentamente en historia En pasado... En "Aquellos días". Y aunque me lleves a cocochito por mas cansada que este indefectiblemente Vos también te vas a cansar. Me vas a tirar al piso y a pesar que llore de cansancio no me vas a levantar... Es hora que aprendamos la parte que nos toca y que no queremos aceptar... Cuando la hora llega no queda mas que tomársela con calma y dejar que pase sin anestesia sufrir lo sufrido, llorar lo necesario. Decir adiós y dar la vuelta hasta que el camino nos cruce algún otro día de esos como antes... Porque aunque huela tu cuello cada día que te veo, tratando de hallar tu perfume, si no esta no voy a poder deleitar tu fragancia... Y si no esta no hay vuelta que darle...
Damos un paso lento para adelante con temor de caernos y cuando por fin vemos que estamos al borde del precipicio retrocedemos cien pasos corriendo... Vivimos aterrorizados de estar al borde del abismo. Nos da demasiado temor caer sin paracaídas y que al fondo de esa infinita caída nos arrastre la corriente de un río super veloz y nos lleve lejos de donde estábamos. No poder volver a trepar esas rocas. O terminar en una selva peor que el precipicio del que nos caímos... El no saber que va a pasar con cada paso que damos nos crea incertidumbre, pero de eso se trata... No todos los pasos que demos tienen que en marcarse en el camino que planteábamos... Y no por eso hay que temer. A veces un paso a la izquierda y dos a la derecha (en vez de ir para adelante uno y retroceder cien) no esta tan mal, hay que aventurarse por nuevos rumbos...


Cuando el amor se tomo unas vacaciones
la vida le dio milonga y él bailo
nunca le dijo que no a otros rocanroles...

Ninguno de los dos crei en el destino, y éste se vengo para hacerse notar,
les va poniendo mas piedras en el camino...